Llumera” portando el Pà Beneït con sus acompañantes.
l’Ofrena, la donzella era abillada amb mocador blanc i coberta amb quatre teles blanques sobre un llibrell de ceràmica, que descansava en el seu cap auxiliada per un coixí. En la seua superfície, es col·locava el grandiós (i exquisit, tot cal dir-ho) pa dolç d’uns 15 kg., que s’obtenia de la farina resultant de moldre una barchilla de blat. Pobra dona! Hui, quelcom menys “rudos” i amb possibles informes de Sanitat anunciant riscos de contractures i cervicalgias, el Pà Beneït només pes 7 kg.leyendayenda
Ofrenda de flor a sant grerori
Aigua bendita i es dona abeure a tots es visitans
En la actualidad, aún podemos hallar tres manifestaciones del ritual en nuestra provincia: Benifallim, Gorga y la Torre de les Maçanes. En aquellas fiestas paganas, que se desarrollaban en lindos bosquecillos y mesetas al aire libre (al igual que la “mona”, que eran panes ovados en honor a Venus), las jóvenes y virginales doncellas se consagraban como “mujeres” transportando grandes panes que posteriormente eran ofrendados a dichas diosas y comidos colectivamente (ojo, los panes)
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